Fue construido a principios del Imperio, en un momento en el que se llevaba a cabo la nueva vida política, económica y religiosa. Antes del teatro se localizaban en este emplazamiento unas termas de la época republicana, de las que se conserva parte del suelo de opus spicatum. El teatro fue construido sobre las estructuras de las antiguas termas (habiendo sido estas trasladadas a un solar cercano).

El teatro fue construido en tiempos de Augusto, en el siglo I a. C. y estuvo en uso durante dos siglos, aunque a finales del siglo II d. C. ya era muy escasamente usado. En algún momento del siglo III (indeterminado) fue abandonado su uso definitivamente. 

Durante siglos el teatro romano permaneció oculto bajo calles y viviendas que se encontraban en la ladera de la Alcazaba. En 1940, durante la construcción de un nuevo edificio que sería “la Casa de la Cultura”, en concreto durante las obras de ajardinamiento, salió a la luz una construcción que, al aparecer, se asemejaba a una serie de gradas escalonadas, más tarde se comprobó que se trataba nada menos que de un teatro romano.

Dentro del recinto debemos pasar por el Centro de Interpretación para acceder al monumento. En este edificio podemos encontrar dos salas:

• Sala de proyección. En esta sala se reproduce en bucle un breve video acerca de la disposición del teatro en su época de esplendor.

• Sala de restos arqueológicos. Sala donde se exponen casi todos los artefactos originales descubiertos a raíz de la excavación del teatro, y decimos casi ya que algunos se encuentran en el Museo de Málaga (a poca distancia del teatro).

Además, encontramos la pirámide de cristal, en plena calle, donde hay piletas de garum vinculadas a la historia del teatro.

Como todos los teatros romanos, heredó los rasgos fundamentales de los griegos. Todas las partes del teatro, como la bóveda de cañón o el graderío semicircular, proceden de fuentes griegas, que por el uso característico de la madera no han podido perdurar, por lo que no nos han llegado.

Al principio los romanos también construían con madera, hasta que en el año 52 a. C., Pompeyo construyó el primer teatro en piedra, que pasó a ser el material predilecto a la hora de construir.

Actualmente el teatro está abierto al público para visitas turísticas y el monumento es frecuentado por los estudiantes durante sus excursiones, que van con el fin de aprender de una manera más interactiva cómo era la cultura romana y el paso de dicha civilización por la ciudad.

Si bien la entrada es gratuita, su horario más restringido, el cual abre de martes a sábados de 10:00 h a 18:00 h y domingos y festivos de 10:00 h a 16:00 h.

Málaga tiene gran cantidad de reclamos turísticos, y este teatro romano es una visita que no puede faltar en tu viaje.