Descripción
El hotel Villa se encuentra a 1 km de la localidad histórica de Biar y está rodeado de bosques de pino mediterráneo . Cuenta con un gimnasio, una sauna y una piscina al aire libre con una terraza.Todas las habitaciones del Villa de Biar cuentan con aire acondicionado y balcón . También disponen de una caja fuerte y un minibar . Los cuartos de baño incluyen un secador de pelo y artículos de tocador.El restaurante a la carta del hotel ofrece cocina regional y platos internacionales . Por las mañanas se ofrece un desayuno de tipo bufé . Los huéspedes podrán disfrutar de la bebidas del bar o de otros tentempiés gracias al servicio de habitaciones.El Villa de Biar está situado a los pies de la sierra de Mariola y del valle de Vinalopo (tex. rural-Gt). Se encuentra a 8 km de Villena y a 45 de Alicante . Este hotel ofrece alquiler de coches y aparcamiento gratuito.Habitaciones del hotel: 40 . Cadena hotelera: Grupo Poseidón .El municipio conserva un importante conjunto histórico, compuesto por su castillo, la iglesia de la Asunción, varias ermitas y otros edificios, así como el conjunto de su casco medieval.[4] Conserva, asimismo, un amplio patrimonio natural, ya que la mitad de su término municipal corresponde a masa forestal,[5] incluyendo varios árboles monumentales.[6La población del municipio de Biar data de época prehistórica, cobrando peso demográfico durante la Edad del Bronce. De esta época quedan varios yacimientos, destacando el de la Cova del Cantal,[3] , el Cabezo de les Gerres y el Cabezo Gordo, además de varios enterramientos en la zona del castillo y la Cova Negra.[2] Gran parte de los hallazgos de esta época se conservan en el Museo Arqueológico de Villena. Tras la Edad del Bronce, se constata la caída demográfica común a toda el área durante este periodo. La población vuelve a aumentar en época romana, pero hay constancia de que existiera un núcleo de población estable hasta tiempos de al-Ándalus. La primera mención que se tiene de Biar es un documento islámico del siglo XII donde aparece como una plaza fuerte dependiente de Játiva.[2]Asignado este lugar fronterizo a la Corona de Aragón por el tratado de Almizra de marzo de 1244, la fecha que algunos consideran como de su rendición es la de 1245, mientras que otros la retrasan al 1253. Fue la última ciudad del antiguo Reino de Valencia que sitió Jaime I, acampando ante sus puertas durante 5 meses antes de que la ciudad se rindiera con buenas condiciones.[9] En principio, el rey respetó la presencia, las posesiones y las costumbres de la población musulmana, y se limitó a establecer una guarnición, arrendar las rentas reales y cobrar impuestos. Pero la sublevación de los musulmanes (1276-1278) conllevó su expulsión de este lugar. En 1280, Pedro III de Aragón confirmaba las heredades repartidas a la población cristiana en un documento que se ha juzgado como una verdadera Carta Puebla del lugar. Jaime I la dotó de privilegios, entre ellos el de ser una de las pocas villas que desde 1287 tendría voto en las Cortes del Reino de Valencia. Su función fronteriza como plaza fuerte y aduanera le valió la leyenda Claudo et Aperio Regnum (cierro y abro el reino) que aparece en su escudo,[2] junto a las dos llaves cruzadas, portadoras de la misma simbología.[10